ESG y desarrollo sostenible

Las siglas ESG hacen alusión a “environmental, social and governance” que, en español, se traducen como los criterios medioambientales, sociales y de gobernanza que han de seguir las empresas en aras de minimizar, tanto cuanto sea posible, su impacto medioambiental, construir un mundo más sostenible y responsable, así como mejorar sus procesos de gestión.

Los términos ESG y desarrollo sostenible han ganado una gran relevancia en la actualidad, transformándose en componentes clave en la evaluación de riesgos y oportunidades de las empresas.

Durante el ejercicio 2025, un elevado número de empresas deberán presentar informes de sostenibilidad (que ya aplica a entidades de interés público de más de 500 empleados), incluidas aquellas que no formen parte de la Unión Europea y tengan filiales que operen en su territorio.

ESG: Environmental, social and governance

Informe de sostenibilidad

Un informe de sostenibilidad es una memoria que las entidades desarrollan y cuyo principal objetivo es el de informar a los grupos de interés de los impactos positivos y negativos que trae consigo el desarrollo de su actividad empresarial. Dichos impactos se reflejan en el ámbito social, medioambiental y de gobernanza. Además, los informes de sostenibilidad incluyen las actividades que las entidades están llevando para minimizar los impactos negativos y aumentar los positivos, así como los retos a futuro.

Los informes de sostenibilidad permiten divulgar las políticas, procedimientos y métricas de carácter no financiero a las partes interesadas, entre las que se incluyen principalmente los inversores, empleados, clientes y el público en general.

A partir de 2025, la obligación de realizar informes afectará a las empresas que cumplan dos de los tres siguientes requisitos:

Balance total de, al menos,
20 millones de euros

Facturación neta igual o superior a
40 millones de euros

250 empleados o más

Informe de evaluación y diagnóstico de sostenibilidad

Los informes de sostenibilidad deben incorporar el correspondiente análisis de materialidad, que hace alusión al estudio de los temas de mayor impacto en una entidad, así como los de mayor relevancia para los grupos de interés que se relacionan con ésta. Su análisis constituye, en la actualidad, una herramienta estratégica absolutamente necesaria en las organizaciones comprometidas con los hitos de sostenibilidad.

En The Compliant seguimos las directrices GRI (Global Reporting Initiative), fundamentales para la elaboración de informes ESG.

El diagnóstico de sostenibilidad, incluye los siguientes documentos que conforman la estructura del mismo:

Análisis de materialidad (externo/interno)

Diagnóstico y verificación

Informe final y plan de acción